Ella me cantabacanciones para dormirmientras su público erapoco más que mi espalda. Le cantaba a un públicoque de todas manerasno podía ver,porque el alma no tiene color o forma. A lo lejos sonabaalgún difuso oso musicalde mi infanciao aquella sonata rusa que me describe. La congoja se dibujabaen mis ojos veladoscon las siluetas de las…