Nuestros ojos
se despidieron
sin que lo sepamos
o imaginemos.
Pero en ese momento previo,
que pudo ser cualquier momento,
éramos felices.
Y ese momento
se podrá repetir
con cualquier otra persona.
Pero no será nunca igual,
porque junto a mí
tú no estarás.
El futuro será entonces
solo un espejo imperfecto,
un recuerdo revivido.
Mis poemas,
simples elegías
que contarán al cansancio,
algo que no supiste entender.
Bajo el cielo,
esta puede ser
la historia de cualquiera.
Tags: .

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Relacionadas

No hay que dejar sola a la IA, cada vez más difícil para los medios y más
Cursos y eventos, anuncios de Google y muchas noticias
¿Sabemos cómo “piensa una IA”? La verdad es que no…
Productividad 2.0: meté IA en tu rutina y ganá horas de vida
La IA en el Congreso, qué pasa con Chrome, alucinaciones y más
Códigos que confunden, el nuevo rey del video y profesiones en riesgo
¿Perderemos nuestra capacidad de asombro?