No es cierto
eso que dicen
algunos cuentos
sobre finales felices.
Para empezar
ningún final
puede terminar bien,
a menos claro
que finalice el dolor.
Yo puedo dar
muchas respuestas ya,
pero no creo
que las quieras escuchar.
Y la verdad,
es que todo suena tonto,
siempre tropezando
con el mismo escollo.
Pero seguramente
sigamos de la misma manera,
ignorando nuestros conocimientos
y guiándonos por nuestras penas.