Lucía Yaggi tiene 5 años y su habitación es de un solo color: Violetta.
No porque las paredes estén pintadas en esa tonalidad, sino porque su almohada es de Violetta, su acolchado es de Violetta, sus sábanas son de Violetta y así hasta enumerar los objetos que una nena puede tener con ella: desde sellos hasta stickers, pasando por la ropa y los esmaltes.
Lucía y otras 15.000 personas ayer caminaron por las calles de tierra de Aldea Romana para poder ver a Martina Stoessel en el Club Midgistas del Sur, en el marco de su gira Violetta Live 2015 International Tour.
Con 5 años cantó y bailó las canciones de la estrella de Disney que ilustra sus remeras, sus cuadernos y que ve cuando se acuesta y cuando se levanta.
Durante 2 horas Lucía pudo cumplir el deseo de muchos: conocer (aunque sea de lejos) a su ídolo.
Cuando terminó, feliz, le dijo a su mamá: “Me encantó el show porque vi a ‘Tini’ y a todos sus amigos”.
Las entradas tuvieron un valor entre 300 y 1.100 pesos, según la ubicación.
Merchandising
Dentro del estadio no vendían, sólo comida y bebida. Afuera, diversos vendedores ambulantes ofrecían vinchas, banderas y gorros con costos entre 20 y 100 pesos.
La entrada y la salida
Desde la organización, varios días antes, comenzaron a convocar a los asistentes 2 horas antes del inicio del espectáculo, a las 17:30, debido al enorme número de entradas y la dificultad para acceder al lugar.
Tanto al ingreso, como a la salida, las largas colas de chiquitos con sus padres llenaron varias cuadras de Aldea Romana.
Y pese a que el show comenzó tarde, había personas que pasadas las 18 todavía estaban intentando ingresar.
Desde un dron
Nota publicada originalmente en La Nueva.